
(Por Cristian Paladino) – En la tarde del jueves, en Ciudad Deportiva, la División Reserva de San Lorenzo se reencontró con la victoria al imponerse por 2 a 0 frente a Godoy Cruz. El resultado fue clave para renovar confianza en el tramo final del torneo y, al mismo tiempo, puso en escena a varios juveniles que empiezan a afirmarse en la categoría. Uno de ellos fue Valentino Bossio, autor del segundo gol azulgrana y una de las figuras destacadas del partido.
Bossio nació el 27 de marzo de 2007 en la ciudad de Salto, Provincia de Buenos Aires. Llegó al club con apenas seis años, en 2013, luego de formarse en el C.U.S.A. (Centro Universitario Salto Argentino). Más de una década después, empieza a devolver con fútbol y actitud todo el recorrido realizado en la cantera del Ciclón.
El volante creativo tuvo una actuación sólida, asociándose con criterio en el mediocampo, mostrando desequilibrio en el uno contra uno y cerrando su tarde con un gol que rubricó el triunfo. “Desde el comienzo pudimos sacar ventaja y eso nos permitió manejar el partido, aunque sabemos que hay distracciones que debemos corregir”, analizó tras el encuentro.
El plantel que conduce Alan Capobianco atraviesa un proceso de renovación, con muchos futbolistas que están teniendo sus primeros minutos en la categoría. En ese contexto, el rendimiento del equipo fue un buen punto de partida. “Es un plantel nuevo, con un cuerpo técnico nuevo y varios compañeros que están debutando. Eso es bueno tanto para el club como para la división”, destacó Bossio, que valoró especialmente lo que significa ganar: “Siempre que se gana, se entrena distinto. Nos da confianza y nos sirve mucho para los partidos que vienen”.
En lo personal, Bossio transita el presente con alegría y compromiso. “Estoy disfrutando mucho este momento y tratando de perfeccionar la idea que propone el técnico. Capobianco nos pide protagonismo, que tengamos la pelota y seamos pacientes para construir el juego”, comentó. Y agregó: “A mí me pide que colabore en defensa, que me suelte en ataque y que me anime a terminar las jugadas”.
Cuando se describe como jugador, el talento no duda: “Me gusta tener la pelota, gambetear, abastecer a los delanteros y, por supuesto, hacer goles”. Además, es un observador constante: “Miro mucho fútbol y me fijo especialmente en los jugadores de mitad de cancha para adelante que tienen buen pie. Trato de aprender e incorporar cosas”.
Con 18 años recién cumplidos y un largo camino por delante, Valentino Bossio ya dio un primer paso firme en la Reserva. El gol frente a Godoy Cruz fue una muestra de su potencial, pero también el reflejo de un perfil bajo, trabajador y enfocado en seguir creciendo. “El objetivo es sumar minutos y consolidarme en la categoría”, resume. En Boedo lo siguen de cerca, sabiendo que el talento está —y que su historia recién empieza.