(Por Cristian Paladino) – El pasado martes 24 de junio, una presencia especial le dio calor y valor agregado a la jornada de entrenamientos en la Ciudad Deportiva de San Lorenzo. Enzo Kalinski, ex jugador del club, campeón del Torneo Inicial 2013 y de la Copa Libertadores 2014, volvió a pisar el césped de Boedo, esta vez para brindar una clínica de fútbol a los chicos del fútbol infanto juvenil que compiten en la Liga Metropolitana (B), actividad que coordina el Licenciado Marcelo Di Gregorio.
Kalinski es un nombre muy querido por el mundo San Lorenzo. Su paso por la institución no solo estuvo marcado por importantes logros deportivos, sino también por una fuerte identificación con los colores azulgranas y una actitud profesional que dejó una grata imagen en todos los rincones del club. Su presencia fue celebrada tanto por los entrenadores como por los jugadores, que vivieron una jornada distinta, enriquecida por el conocimiento y la experiencia de alguien que supo vestir con orgullo la camiseta del Ciclón.
Actualmente enfocado en su formación como director técnico, Kalinski decidió incluir al club de sus amores dentro de su recorrido profesional, eligiendo compartir herramientas y valores con las nuevas generaciones. Durante la jornada, trabajó en el campo con los chicos, propuso ejercicios técnicos y tácticos, y se involucró de lleno en el desarrollo de la actividad. En particular, trabajó con las categorías infantiles 2016 y 2017, que están a cargo de los profesores Franco Randazzo y Carlos Morales.
Lejos de la solemnidad, el encuentro se caracterizó por la cercanía, el entusiasmo y la pasión compartida. Kalinski no llegó como una figura lejana, sino como un sanlorencista más, dispuesto a acompañar, corregir y estimular a quienes hoy dan sus primeros pasos en el semillero azulgrana.
Acciones como estas fortalecen el vínculo entre las generaciones y reafirman la importancia de tener referentes positivos cerca de los más chicos. Enzo Kalinski volvió a Ciudad Deportiva no solo para enseñar, sino para seguir construyendo desde otro lugar esa identidad azulgrana que tanto lo representa.
